Conocer las señales.

¿Estoy yo o alguien a quien quiero seguros en la carretera?

MIT AgeLab y The Hartford realizaron una encuesta entre conductores maduros que incluyó una pregunta sobre las condiciones en las que el conductor consideraría que alguien debería hablar con él o ella sobre su conducción. Las siguientes situaciones (se indica el porcentaje de encuestados) ofrecen algunas sugerencias sobre cuándo usted podría empezar a pensar en modificar sus hábitos de conducción.

  • Si tuve algún incidente de olvido o si me perdí mientras estaba conduciendo (66 %)
  • Luego de un cambio significativo en mi salud (66 %)
  • En general, me preocupa mi seguridad (59 %)
  • Si estuve involucrado en un accidente grave (44 %)
  • Si evité por poco estar involucrado en un accidente (29 %)
  • Si estuve involucrado en un accidente leve (21 %)
  • Si cometí un error durante la conducción (15 %)

(Para más información consulte: https://s0.hfdstatic.com/sites/the_hartford/files/family-conversations-research.pdf)

Asimismo, a medida que envejecemos, nuestra visión y las capacidades físicas y cognitivas cambian, y afectan muchas actividades de nuestra vida cotidiana.  Si usted o alguien cercano a usted ha tenido un creciente número de caídas, ya no puede gestionar sus propias finanzas, le han dicho que no debe cocinar, tiene dificultades para ver televisión o la señalización, o padece lapsus de memoria, estas también pueden ser señales de que es el momento de evaluar sus competencias y tal vez adaptar las habilidades de conducción.  Esto puede indicar que es momento de hablar más con su prestador de servicios médicos, completar un cuestionario de autoevaluación o una evaluación profesional y considerar cambios en su vehículo o en sus hábitos de conducción.  Tenga en cuenta que si su prestador de servicios médicos lo deriva para una evaluación de su capacidad para realizar actividades diarias, dicha evaluación es también una buena ocasión para hablar sobre otras competencias de la vida cotidiana.